Con este post de Édouard Manet, dejo atrás un mes de creación, exposiciones, de explicar mi proceso creativo, para empezar otra etapa de análisis, de estudio, de mejora y novedades.
Así pues esta semana empiezo una seria de artículos dedicados a los pintores que formaron parte del movimiento impresionista.
La semana próxima si todo va bien estrenaré video analizando los cuadros de este pintor.
La primera figura que te propongo hoy es la de Édouard Manet.
Así que con un buen café o té empezamos 🙂
Sus orígenes
Édouard Manet nació en París el 23 de enero de 1832 en el seno de una familia burguesa con contactos en la política, su padre era Auguste Manet era jefe del personal del Ministerio de Justicia, por su parte la madre era Eugénie-Désirée Fournier hija de diplomático y ahijada del príncipe heredero de Suecia.
Su tío le introdujo en el mundo del arte cuando aún era estudiante, sus notas no eran brillantes y no pudo acceder a derecho.
Como su padre se oponía a que ingresara en una academia de arte, con 16 años se alistó como marine en la marina francesa en prácticas, viajando a Río de Janeiro, a su vuelta suspendió los exámenes de acceso.
Sus años de aprendizaje
Entonces fue cuando su padre aceptó su vocación por la pintura y lo matriculó en 1850, a la academia – taller de Thomas Couture, pintor y profesor reconocido de estilo académico.
Estuvo seis años copiando cuadros del Louvre de maestros como Tizano, Rembrandt, Goya, Delacroix, Courbet y Daumier.
Independencia artística
Completó su formación viajando por Italia, Países Bajos, Alemania, Austria y España.
Durante su estancia en nuestro país quedó gratamente impresionado por nuestro folclore, sirviéndole de inspiración para sus obras.
A su retorno abre un taller compartido con el pintor y grabador Albert de Balleroy, en la calle Lavoisier de París.
Su estabilidad
Entre 1862 y 1865 expuso sus obras en la Galería Martinet
Tras unos 13 años de relación secreta y un hijo fuera del matrimonio, en 1863 se casó con la pianista neerlandesa Suzanne Leenhoff
En 1869 aceptó como alumna a Eva Gonzalès que la retrató un año después.
La Guerra franco-prusiana
Al estallar la guerra envió la familia a Oloron Sainte Marie, situada en los Pirineos.
Un gran número de obras suyas las envió a Théodore Duret con intención de venderlas y protegerlas.
Entró como teniente en la Guardia Nacional durante el sitio de París. Además formó parte de la federación de artistas de la Comuna de París.
Exposiciones
En 1863 presentó El almuerzo en la hierba al Salón Oficial de París, el jurado lo rechazó al quedar escandalizado por ser rompedor con los cánones establecidos.
Como habían varios cuadros interesantes rechazados, el emperador Napoleón III decidió hacer una exposición llamada El Salón de los Rechazados.
Dos años después consiguió exponer en el Salón Oficial su Olympia pintada en 1863, pero la obra no se libró de las críticas de los puritanos.
Allí conoció su amigo Théodore Duret, periodista y crítico de arte de profesión.
En 1867 la Exposición Universal, con sede ese año en París, se negó a exponer su obra.
Como era hombre de recursos y tenía ganas de mostrar al mundo su obra se costeó un pabellón para él solo, exhibió 50 obras principalmente de tema taurino, muy de moda en la época, e inspirado por su viaje a España.
Su relación con los impresionistas
En 1867 Émile Zola escribió un artículo en Le Figaro sobre nuestro pintor, defendiendo a su amigo de las críticas, venía a decir algo así como que los grandes pintores empiezan contrariando al espectador.
A partir de ese momento, otros pintores del grupo de los impresionistas empezaron a defenderlo.
Durante la guerra intimó más con el grupo de los jóvenes impresionistas, adaptando algunas técnicas impresionistas, aunque nunca quiso considerarse impresionista.
El marchante de arte Paul Durand-Ruel en 1872, compro 24 obras de Manet, las expuso junto a otras obras impresionistas.
Desgraciadamente no tuvo mucho éxito la muestra. Pero creó una idea de grupo que les llevó a formar la Société anonyme des artistes (Sociedad anónima de artistas), cuya objetivo era organizar exposiciones.
Su relación con Monet
Al principio de conocerse estos dos genios su relación fue un poco seca, pero enseguida limaron asperezas y compartieron jornadas de pintura al aire libre.
De estas quedadas surgió la obra Navegación de 1874.
En este periodo realizó una exposición de sus obras en su taller de la calle Saint Petersboug, algunas fuentes indican que llevó a tener 4000 visitantes. 🙂
Sus éxitos y su salud
El genio también era humano, estaba dedicado de salud, desde hacia mucho tiempo tenia problemas circulatorios.
Se agravaron en 1880, ese mismo año expuso sus lienzos en las oficina del periódico La vie moderne.
Tuvo fuerzas suficientes para viajar hasta Londres para asistir a la exposición de arte francés en Burlington House.
De forma simultanea, en París se podía ver en el Salón Oficial la pintura El bar del Folies Bergère de 1882, con un estilo indiscutiblemente impresionista.
Su etapa final
Sus éxitos no mejoraban su estado de salud, aunque se mudó de casa en dos ocasiones y se sometió a tratamientos hidroterapias en Bellevue.
No evitó que en 1883 se le gangrenara la pierna izquierda, tuvo que ser amputada. Complicaciones del proceso le provocaron la muerte el 20 de abril de ese mismo año, a la edad de 51 años 😥
Sus últimos éxitos
Poco antes de morir pudo gozar del éxito al lograr el reconocimiento de Salón Oficial de París, otorgándole la medalla de segunda clase.
También recibió el titulo de Caballero de la Legión de Honor.
El Salón Oficial, tanto que lo había criticado, finalmente le hizo una exhibición honorifica en 1905.
Su aportación
Su estilo rompía con las viejas doctrinas, los personajes de sus cuadros por primera vez eran marginados de la sociedad, tales como vagabundos, prostitutas, enfermos…
Compartió técnicas con los impresionistas y se influenciaron.
A mi modo de ver retrataba el París chic, pero con protagonistas reales.
Muchos pintores del S.XIX y XX recogen esta idea de pintar lo marginal, como es el caso de Nonell, o de Picasso, que ahora me viene a la cabeza, pero hay muchos otros….
Su lado humano
Era un hombre muy sensible a las críticas, muy inseguro de su técnica, dicen que contradictorio, con mal carácter.
Incluso con los amigos, reto a duelo a su amigo, Edmond Duranty por haber publicado críticas poco favorecedoras de su obra.
Cuando estaba preparando el artículo encontré una frase que me gustó mucho y quiero compartirla contigo, querida lectora… “ lo único que buscó fue el éxito dentro de la respetabilidad”.
Creo que es una buena frase para definir la vida de un ser humano.
Conclusión:
Édouard Manet, dandi parisino de la viaja escuela, tiene mucho que enseñar a las nuevas generaciones de artistas y personas, a mi forma de ver.
Te insta a no rendirte, ni a no abandonar tus ideales, aunque no les guste a la mayoría.
Además te confirma que con esfuerzo y perseverancia los resultados convertidos en éxitos llegan.
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Gracias por leerme.
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Hasta la próxima 🙂
Recuerda que en el arte como en la vida siempre se aprende 🙂
Webgrafía:
https://es.wikipedia.org/wiki/%C3%89douard_Manet
https://historia.nationalgeographic.com.es/a/edouard-manet-pintor-incomprendido_16703
http://theartandlife.blogspot.com/2012/08/un-paseo-por-el-arte-pareja-en-un-barco.html